La clave para desarrollar todo tu potencial a través de la Terapia Ocupacional - SANUM

 

 

¿Qué es y para qué sirve la terapia ocupacional y cómo puede ayudar a niños, jóvenes y adultos?

La sociedad, en general, no tiene muy claro lo que es la terapia ocupacional, a no ser que alguna vez hayas necesitado a un terapeuta ocupacional, bien para ti, un familiar, o un amigo, etc. La terapia ocupacional no es “entretener”, “cuidar a ancianos” o “jugar con niños”, la terapia ocupacional es una carrera universitaria, cuyo objetivo es ofrecer una calidad de vida a las personas con alguna dificultad física, psíquica, sensorial o social. El terapeuta ocupacional trabaja sobre las capacidades o limitaciones que tiene la persona en su entorno, pudiendo adaptar las actividades, entrenando productos de apoyo para que faciliten la actividad o modificando conductas, con el objetivo de ayudar a dicha persona para que sea lo más independiente posible en su día a día.

Según la Asociación profesional española de Terapeutas Ocupacionales (APETO), la Terapia Ocupacional es: “Una profesión sociosanitaria que a través de la valoración de las capacidades y problemas físicos, psíquicos, sensoriales y sociales de la persona, pretende, con un adecuado tratamiento, capacitarle para alcanzar el mayor grado de independencia posible en su vida diaria, contribuyendo a la recuperación de su enfermedad o facilitando la adaptación a su discapacidad”.  Es una profesión que se ocupa de la promoción de la salud y el bienestar a través de la ocupación.

La terapia ocupacional en niños se encarga de evaluar las habilidades y las destrezas para potenciar el desarrollo de las que se encuentren alteradas. El terapeuta a través del juego ayuda a llevar a cabo tareas del día a día como comer, vestirse, escribir, jugar con otros niños, etc. En los jóvenes puede ayudar en las relaciones sociales, en la independencia, en las actividades de la vida diaria, en la búsqueda de empleo, etc.

En el adulto, el objetivo de la terapia ocupacional es buscar la máxima independencia en las actividades de la vida diaria y ofrecer la mayor calidad de vida, ya sea a través de rehabilitación, estimulación, adaptación del entorno, buscando productos de apoyo, etc. El terapeuta ocupacional previene y rehabilita las funciones deficitarias que no permiten la independencia de la persona, dando así una buena calidad de vida y detener el deterioro propio de la edad o la enfermedad, así como detener la dependencia.

¿Cuándo debo llevar a mi hijo a un terapeuta ocupacional?

El momento para acudir a Terapia Ocupacional es cuando encontramos una dificultad para desarrollar las actividades de la vida diaria, ya sea un problema motor, sensorial o mental.

Algunas veces la persona acude directamente a un terapeuta ocupacional, otras veces es derivada por otro profesional, como profesores, médicos, etc. Después de esto, es cuando los terapeutas ocupacionales realizamos una valoración para conocer más a la persona e identificar las posibles causas que dificultan la independencia en el día a día. Una vez realizada la valoración, se buscan los objetivos que se quieren conseguir, junto con la persona o el familiar.

¿Qué se hace en Sanum Terapia Ocupacional?

Una vez esté realizada la valoración y plasmados los objetivos, buscamos actividades o productos de apoyo que nos ayuden a conseguir dichos objetivos.

 

 

En el caso de los niños, las actividades que se realizan para conseguir los objetivos se basan en el juego, ya que es la principal actividad básica de la vida diaria de los niños, además de ser la mejor forma para motivarlos y conectar con ellos de forma terapeuta-usuario.

En el caso de los jóvenes y los adultos, las actividades tienen que tener un porqué, por lo que tienen que ser lo más real posible, imitando los movimientos o actividades propias de las actividades de la vida diaria.

¿Qué beneficios aporta la terapia ocupacional en niños con TEA?

La terapia ocupacional trata las funciones sensoriales, desarrollando la reacción que puede tener un niño ante estímulos táctiles, gustativos, olfativos, auditivos, visuales, propioceptivos o vestibulares. También aborda los problemas de atención y dificultades de comportamiento.

Por otro lado, asiste en las dificultades de la destreza manipulativa tanto fina como gruesa, por ejemplo cuando hay un agarre que no es funcional a la hora de coger el cubierto o el lapicero. También plantea estrategias para mejorar las habilidades sociales y el juego con otros niños.

Más aún, evalúa la independencia en las actividades de la vida diaria y aprovecha el juego para entrenarlas (como pueden ser la alimentación, el vestido, el aseo personal, etc.).

Asimismo, el terapeuta ocupacional puede intervenir en varias áreas en las personas con TEA, como sería un buen tono muscular o el equilibrio a través de circuitos.

En fin, el objetivo de la terapia ocupacional en personas con TEA, es ayudarles a conseguir las destrezas necesarias y adecuadas para su edad, para que sean los más independientes en su vida diaria, ya sea entrenando dicha actividad, trabajando las funciones sensoriales para tener una buena reacción ante ciertas texturas/ruidos/olores, etc. O modificando la forma de ejecutar la actividad o encontrar un producto de apoyo para que así le resulte más sencilla la actividad y, por lo tanto, sea más independiente.